Los vehículos de energías alternativas pueden utilizarse para reducir la necesidad de poseer un automóvil personal, aumentar el acceso a un transporte público seguro y asequible y apoyar los objetivos de desarrollo urbano proporcionando alternativas de menor coste para viajes cortos. En la mayoría de los casos, estos beneficios sólo se materializarán cuando más flotas privadas y de empresas estén propulsadas por energías alternativas en lugar de motores de gasolina o diésel. En consecuencia, es necesario equipar más vehículos con opciones de recarga, aumentar la cobertura de la infraestructura de recarga y apoyar servicios de mantenimiento rentables para los vehículos de energías alternativas. Este artículo ofrece consejos sobre cómo aumentar la flota de vehículos propulsados por energías alternativas en sus operaciones y sobre las ofertas de coches de ALD.
Crear una infraestructura de recarga para todos los vehículos.
Antes de empezar a reequipar vehículos con energías alternativas, es importante crear una infraestructura que pueda cubrir todas las necesidades de transporte. Esto incluye estaciones de recarga y repostaje para vehículos privados, así como opciones y sistemas de transporte público. Con una infraestructura de recarga que lo abarque todo, será más fácil integrar los vehículos de energías alternativas en su flota y apoyar las operaciones con costes más bajos. La infraestructura de recarga existente para vehículos privados puede servir de base para la ampliación a energías alternativas. Dado que la mayoría de las estaciones de recarga están diseñadas para motores de gasolina y diésel, por lo general es todo lo que se necesita para alimentar también vehículos eléctricos. Si no hay estaciones de recarga en los lugares donde operan sus vehículos, el personal de mantenimiento puede instalar y utilizar unidades de carga especiales o alquilarlas a terceros.
Eduque a su personal sobre la conducción con energías alternativas
Los beneficios de las energías alternativas dependen de que cada individuo comprenda sus características y cómo afectan a su vehículo. Los miembros del personal deben ser educados sobre cómo las energías alternativas difieren de los combustibles fósiles y cómo pueden utilizar esta información para reducir la demanda de combustibles convencionales. A la hora de conducir, todos los vehículos funcionan de forma diferente. Algunos pueden reducir el consumo de combustible o las emisiones debido al diseño de la cadena cinemática, mientras que otros se adaptan mejor a las cadenas cinemáticas híbridas o totalmente eléctricas. Así pues, el personal debe estar informado sobre las características de funcionamiento de los vehículos de energías alternativas para poder seleccionar la mejor opción para cada flota. Apoyados con esta información, los empleados pueden aprovechar la infraestructura de recarga de vehículos privados para cargar sus vehículos de energía alternativa y favorecer desplazamientos más cortos.